Hey, girls, Brigitte
Bardot isn't solely a french actress worthy of recalling. It's also several
cocktails' name, in honour of her, I guess.
This one is, as far as I know, the newest recipe. A lucky find roaming into the Hong Kong nights a days ago. Taste it closing your eyes and then compare it if still there are doubts.
Recipe:
1 oz gin
1 oz crème de cacao
1 oz evaporate milk
½ oz sugar syrup
Shake all ingredients with ice and strain into a cocktail glass. Sprinkle ground cinnamon and cheers!
sábado, 14 de septiembre de 2013
viernes, 13 de septiembre de 2013
EVA BRACAMONTE Y EL PODER JUDICIAL PERUANO
El Poder Judicial peruano tiene en sus manos la posibilidad de resarcirse un tanto del hondo descrédito y desprestigio en que se halla entrampado.
El caso de Eva Bracamonte, la sentencia que la Segunda Sala Penal dictó condenándola a 30 años de prisión, significó tan sólo una gota de agua más en su océano de vergonzosos -a más de sospechosos- desaciertos, y este término es bastante misericordioso para un fallo tan severo que se basó en una investigación incompleta, titubeante, inconsistente, y que, por alguna misteriosa razón, ha dejado de lado indicios importantes que bien podrían haber cambiado el curso de los acontecimientos.
Si esto ha sido evidente incluso para la propia jueza Choquehuanca y los vocales y la policía, ¿por qué entonces se ha dado esa apresurada y abusiva sentencia habiendo tantos vacíos? Ni siquiera se ha considerado el famoso Beneficio de la Duda que debe prevalecer ante un hecho no esclarecido por completo y que guarda muchas aristas oscuras.
Esto trae a la mente una lamentable realidad, la que a diario nos demuestra que el Poder Judicial peruano está plagado de magistrados incompetentes o envilecidos por el cohecho, que no sabemos de qué procedimientos, recursos o facilidades se han valido para llegar a ostentar ese cargo de tanta responsabilidad, y a quienes lo que menos parece importarles es la justicia. Probidad no se espere de ellos, lo normal es que sus decisiones estén guiadas por simpatías o antipatías personales o ideológicas, por prejuicios primarios o, lo más grave, por los intereses de quienes les ponen dinero en las manos por debajo de la mesa.
Para los pocos miembros honestos con que cuenta el PJP -y que se hallan en una ardua lucha para limpiar un poco los establos, como se dice- se les ha presentado entonces, con el caso de Eva, la oportunidad de oro para asestar un golpe contundente a la corrupción que corroe las entrañas de su institución.
Que cesen las dilaciones y se deje en libertad ya mismo a esta muchacha víctima de maquinaciones enfermizas. Y que a la vez se encause y sancione debidamente a los verdaderos culpables y a todos los funcionarios judiciales que se han prestado a este juego espeluznante.
Que no se pase por alto, por ejemplo, un testimonio tan valioso y definitivo como el de la ex abogada de Ariel Bracamonte.
HOLA
El nombre lo dice
todo. La periodicidad no es una promesa en este blog. Se publicará
cuando se pueda, cuando haya tiempo, sobre todo cuando haya algo
importante -por lo menos, interesante- que decir.
De hecho -saliéndome de las normas, o de lo acostumbrado- éste no será un blog exclusivamente personal. Habrá invitados de vez en cuando, y de vez en cuando postearé comentarios de amigos, publicados antes en otros medios pero cuyo interés justifique la repetición.
Ya sospecharán que formalismos o rigidez tampoco tendrán lugar aquí. La opinión sobre un tema serio podrá alternarse luego sin sonrojos con alguna nota de frivolidad, lo que no quiere decir para nada que daremos cabida a la turbia chismografía farandulera o a la intromisión en las vidas (y miserias) privadas de los famosos, o cosas por el estilo. Hasta la frivolidad debe tener su poco de decencia. Que ciertas desgracias estén de moda me tiene completamente sin cuidado. Yo sigo mis propios caminos.
De hecho -saliéndome de las normas, o de lo acostumbrado- éste no será un blog exclusivamente personal. Habrá invitados de vez en cuando, y de vez en cuando postearé comentarios de amigos, publicados antes en otros medios pero cuyo interés justifique la repetición.
Ya sospecharán que formalismos o rigidez tampoco tendrán lugar aquí. La opinión sobre un tema serio podrá alternarse luego sin sonrojos con alguna nota de frivolidad, lo que no quiere decir para nada que daremos cabida a la turbia chismografía farandulera o a la intromisión en las vidas (y miserias) privadas de los famosos, o cosas por el estilo. Hasta la frivolidad debe tener su poco de decencia. Que ciertas desgracias estén de moda me tiene completamente sin cuidado. Yo sigo mis propios caminos.
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